Donde habitan "los migalas"

Donde habitan "los migalas" (De cuentos y arañas)

sábado, 28 de septiembre de 2013

La última luz

¡Otro avión que cae en plena ciudad!.Murieron 4 perros y 2 gatos, poco más había.................., bueno, y los pasajeros.

El estruendo me despertó, fue cerca de aquí. No duermo bien desde que empezó todo; y luego me quedo frito en cualquier sitio. Algún día encontrarán mi cuerpo desnudo y acuchillado en cualquier cuneta.

-¿Sabes donde están? - me dijo Bill.
- ¿quienes?.
- ¡Los ricos!, ¿quienes van a ser?.
- Se fueron todos.
- ¡No!, ¡están bajo tierra!, ¿No has visto la luz en el fondo de la sima?; venga, echemos un vistazo.
porqué no, pensé, no tengo nada mejor que hacer.
Cogimos unas cuerdas y fuimos a la vieja sima.
- ¡Anda!, ¡es cierto! - dije, - Se distingue una luz ahí abajo.
Atamos las cuerdas a un árbol y bajamos con cuidado.
- Es más profundo de lo que parece - se quejaba Bill.
Al llegar al final, vimos una bombilla colgando de un gancho en la pared.
- ¡Te lo dije!, ¡están aquí! - gritó Bill entusiasmado.
- seguiremos el cable.
Hacía tiempo que no me sentía tan excitado. Bill temblaba de emoción.
El cable recorría la pared como una mecha, que prendería al llegar al final............
- ¡Un enchufe!, ¡un maldito enchufe! - exclamé.
Lo miramos desconcertados.
De una patada, Bill lo arrancó de la pared, y todo quedó a oscuras.
En aquel instante, tiraron mi cuerpo desnudo y acuchillado en una cuneta.


viernes, 20 de septiembre de 2013

Terror en el txiki-park

El barullo era impresionante dentro del txiki-park, que en el hiper-mega-centro comercial de la superpoblada capital, daba vueltas alrededor de una de las millones de estrellas que colapsaba el universo.
Intentaba concentrarme en el libro que tenía delante, antes de que mi conciencia se dispersara para siempre.
Moby-Dick, la ballena, emergía entre el griterío tragándose a más de un niño y alguna que otra madre despistada. El aroma a grasa de ballena fundida y salitre empezaba a impregnarme.
- ¡Aita, aita!, ¡ven conmigo al dragón!.
- Ahora no cielo.
- ¡Venga, que me da miedo bajar sola!.
¡El dragón!, un tubo de unos 6 metros de largo situado en el punto más alto de aquella endiablada e intrincada estructura donde decenas de niños perdidos e histéricos buscaban la salida.
- ¡Bueno, vale!, pero sólo una vez.
Seguí con la mirada la pequeña figura deslizándose agilmente entre rampas, tubos y escaleras.
"-Bueno, vamos allá". Mi agarrotado cuerpo se internó por aquel sinuoso y claustrofóbico laberinto de formas y colores, ¡pero olvidé el cordel que me llevaría de vuelta si aparecía El Minotauro!.
- ¡Leire!, ¡Leire! - gritaba desesperado, arrastrado por la marea de niños-piraña.
Llegué no se como, al punto más alto del txiki-park.
- ¡Leire!, ¿estás aquí?.
Silencio.............oscuridad...............vacío................¿Donde estás?............¿donde están los niños?.............. ¿donde están todos?.
La boca del dragón abría sus fauces ante mí. Me asome a su oscura garganta,..................,y tropecé.
Caí.................caí...................caí.......................Caí entre las insondables e infinitas entrañas de la bestia...................y me parió de nuevo al mundo.
Miré asombrado alrededor, Y lloré.


viernes, 13 de septiembre de 2013

Corazón zombie

- ¡Mira, ahí va uno solo!.
- ¡ Deprisa, que no escape!.
El zombie, un varón de unos 45 años, caminaba encorvado arrastrando un pie.
Javi y yosu habían pasado las últimas 4 horas bajo la gran roca. cerca de allí, habían encontrado bastantes restos humanos acumulados, por lo que debía de haber "un nido" cerca.
- ¡Ahora!.
Javi, le lanzó un lazo, que entró limpiamente por la cabeza del zombie, y de un tirón , lo apretó fuertemente a la garganta.
- ¡No tires mucho, le puedes romper el cuello!.
Yosu, embuchó al zombie con un saco, y tirándolo al suelo, ató la apertura.
- ¡Ya es nuestro!
- Ha sido más fácil de lo que pensaba. ¡Estúpidos zombies!.
Lo patearon con saña, y lo metieron en el coche para llevarlo al garaje.

Lo tenían todo preparado para el experimento: La silla a la que ataron fuertemente las piernas y brazos del zombie, la mesa con el hacha, la sierra y varios cuchillos, y la cámara de vídeo.
Se pusieron largos delantales de plástico, los guantes, y las máscaras de soldar, y procedieron a iniciar el experimento.
Josu, hizo una profunda incisión con el cuchillo alrededor del corazón, y rompiendo con el hacha las costillas y el esternón, sacó limpiamente los huesos. Mientras, el zombie gritaba, desgarrándose las carne con las ataduras.
- Mira ahí está, te lo dije, ¡no late!.
- ¡Asqueroso zombie!.
Agarró el corazón, y lo arrancó, tirándolo contra la pared.
- Vámonos ¡ésto apesta!.

Los primeros rayos de sol se colaban por la ventana del garaje, mientras una lágrima brotaba del único ojo del zombie.


jueves, 5 de septiembre de 2013

Y ahora que voy a hacer

- Lo siento  - dijo la funcionaria - pero no cumple los requisitos que pide la ley.
- ¡Y ahora que voy a hacer! - dijo e chico delgado y desgarbado al que atendía -, ¡no tengo dinero!, ¿de que voy a vivir?.
"Podría llevarle unos días a mi casa............................."
- Comprendo su situación, pero no podemos hacer nada.

Clara y Sonia charlaban después del trabajo.
-¡No es justo!, el pobre chaval no tiene ni para comer y no va a cobrar nada, y el otro que tiene puesto todo a nombre de su hijo de dos años, ¡ dos mil euros al mes!.
- Así son las cosas.
- ¡ Si va a cobrar más que nosotras!, ¡Y sin dar un palo al agua!. ¿Donde está la justicia?.
- Bueno, cambiemos de tema, ¿Qué tal con Alberto? - Una inmensa sonrisa se dibujó en los labios de Clara. - ¿Se te ha declarado ya?.
- Creo que lo hará esta noche, me a invitado a cenar, y me a dicho que tiene una sorpresa para mí.
- ¡Vaya! , por fin se va a cumplir tu sueño.
- ¡No me lo puedo creer!, ¡es lo mejor que me ha pasado en la vida!.

Clara llegó a su casa, se puso ropa cómoda y se tumbó en la butaca a ver la televisión; aún tenía tiempo antes su cita con Alberto.
Echaban las noticias en la caja tonta: "Noticia de última hora. Una persona ha resultado muerta por arma blanca en el atraco a una joyería. La víctima se encontraba en esos momentos en el lugar del suceso."
Clara parpadeó varias veces, la foto que apareció en la pantalla ¡era la de Alberto!.
"El atracador, un joven indigente, fue arrestado por la policía y puesto a disposición judicial."
En la pantalla se veía a dos policías llevando esposado al joven delgado y desgarbado.
El joven miró por un momento la cámara que le grababa; en sus ojos se leía una pregunta: ¿y ahora que vas a hacer?.




Te quiero

La música de star-wars abrió la puerta. El crucero espacial del imperio cruzó la habitación mientras la leyenda salía por la ventana abierta.
- ¡Vaya, es real! - exclamé mientras tocaba la dorada armadura de C3PO.
- ¿Otra vez viendo esa película?, ¿es que no te cansas nunca?.
¿Como me iba a cansar del único trozo de realidad inmutable incrustada en mí?.
Le mire: El mismo gesto de reproche, la misma expresión de fastidio.
- ¡Podrías echarme una mano, hay mil cosas que hacer!.
¿Es ésta la realidad?, ¿la que tenemos que reconstruir una y otra vez con los mismos actos?.
- ¡Ya voy!.
Me levanté despacio de la butaca mientras escuchaba a lo lejos la plétora que ella dirigía a quien creía que era yo.
Entonces ocurrió; al sacudir las arrugadas sábanas de la cama, algo rodó y cayó al suelo. Era un anillo.
"Te amaré siempre"; siempre, siempre, siempre,......................; ¿se quedó el amor grabado en el trozo de metal?.
De nuevo la cena, la misma ensalada en la misma silla delante del mismo concurso de televisión.
- Encontré ésto entre las sábanas - le dije mostrando el anillo.
- Se me habrá caído. Ultimamente he adelgazado.
- ¿Me sigues queriendo?.
- Si, claro.
Te quiero, te quiero, te quiero,........................, repetía para mí; palabras como pompas de jabón que estallan.